Cheesecake de Ricotta – deliciosa, cremosa y sin máquina

Esta riquísima tarta de queso o cheesecake está hecha combinando queso crema tipo Philadelphia con queso ricotta en partes iguales. El resultado es una tarta cremosita, con un sabor más sutil muy agradable al paladar. A continuación un par de detalles para que quede espectacular.

Detalles a tomar en cuenta

Lo más importante, en mi opinión, al momento de hacer una cheesecake de cualquier tipo que vaya al horno es usar ingredientes a temperatura ambiente y batir lo menos posible, solo para integrarlos. Si los ingredientes tienen distintas temperaturas y algunos están muy fríos hará falta ejercer más fuerza o velocidad para integrarlos y se generan burbujas de aire en la mezcla que luego inflan la cheesecake en el horno y al sacarla se hunde y agrieta. Lo mismo sucede si se bate demasiado o con mucha velocidad, aun cuando los ingredientes estén a temperatura ambiente. Es decir, hay que encontrar el balance entre usar los ingredientes a temperatura ambiente y mezclar solo lo necesario. Es cuestión de práctica.

La base de la cheesecake es una base de galletas de mantequilla tipo María. Yo he optado por usar una bolsa tipo ziploc y un rodillo de madera para molerlas y así no tener que usar una máquina, pero por supuesto puede hacerse este procedimiento con un procesador de alimentos.

El relleno de la cheesecake contiene por supuesto queso Ricotta, que le da su nombre. Pero no he usado solo ese queso porque la textura de la tarta sería muy porosa para mi gusto. Por ello lo he mezclado con queso crema tipo Philadelphia en iguales proporciones. Cabe destacar que esta receta funciona muy bien si se usa solo queso crema, al contrario que si se usara solo queso ricotta.

Otros aspectos en los que la tarta se puede adaptar es en cuanto a los aditivos. Yo he agregado crema de leche, también conocida como nata para montar o crema para batir, para ayudar más aún a la textura cremosa. Pero si es para dar un contraste de sabor podrían usar crema agria e incluso incluir ralladura de limón. Yo quise dejarla sencillamente de vainilla pero hay muchas opciones para adaptar. Eso sí, idealmente respetando las proporciones y si se van a cambiar las proporciones se debe tomar en cuenta lo que aporta cada ingrediente para poder lograr una tarta con la textura adecuada y que cuaje bien al hornear.

En cuanto al azúcar, encuentro que cuando se presenta sola, sin toppins, se puede aumentar la cantidad de azúcar hasta 150g y queda con buen sabor. Pero si se le agrega el ganache de chocolate con leche como sugiero en esta ocasión, la cantidad de 100g de azúcar es suficiente ya que de otra manera puede quedar demasiado dulce. Otra opción es usar 150g de azúcar pero hacer un ganache de chocolate amargo o equilibrar el sabor con una mermelada de frutas más ácidas o incluso con una crema de limón.

He usado un molde desmontable de 18 cm para hornear esta tarta. Si quisieran hacerla en un molde de 20cm, por ejemplo, tendrían que multiplicar todos los ingredientes (en gramos) por 1.23. Es decir, esta receta necesita 250g de queso crema para 18 cm. Para 20cm necesitaría: 250 x 1,23 = 307,5 o 308g de queso crema. Y así con el resto de los ingredientes. Cada huevo mediano pesa aproximadamente 50g.

Si quieren hacerla en un molde de 24cm, multiplican los ingredientes por 1,78 y si la quieren hacer de 26cm multiplican todo por 2,1.

En esta ocasión decidí engrasar el molde con aerosol antiadherente. Debo decir que en otras recetas de cheesecake o no lo engraso o uso papel de horno. Mi experiencia al engrasar el molde es que la base de galletas a veces se baja un poco de los lados cuando se hornea sola al principio. Quizá si se engrasa solo la base del molde o se coloca el papel de horno sea mejor y puede tratar de usarse un molde que ya tenga una capa antiadherente. Si quieren, pueden ver como preparo otros moldes, les dejo al final del video dos enlaces a otras recetas de cheesecake.

Sobre el tema del baño maría, esta receta que les comparto me ha permitido probar otro proceso de horneado distinto a los que ya había hecho. En lugar de hacer un baño maría directo, agrego agua hirviendo a una bandeja en la base del horno para que esta genere vapor durante el horneado. Ha funcionado muy bien, a pesar de que la tarta quedó con una pequeña grieta superficial en el borde. Esto me pudo haber sucedido porque abrí el horno a los 45 minutos de horneado para chequear si estaba lista (no lo estaba) y para asegurarme que tuviese suficiente agua en la bandeja de la base. Creo que al abrir el horno ese vapor escapó y el horno necesitó más tiempo para crear suficiente vapor otra vez y la tarta se resecó un poco por arriba, creando la grieta.

Por lo tanto, mi recomendación es no abrir el horno para nada y agregar suficiente agua a la bandeja de la base del horno desde el principio y esa agua debe estar caliente, de lo contrario tardará más tiempo en generar vapor. Abrir el horno solo al final, después de los 55 minutos horneando a 150°C o 302°F como se indica. La base de galletas la horneo a 180°C y dejo el horno precalentando a esa temperatura mientras hago el relleno, y solo cuando coloco la tarta dentro es que bajo la temperatura a 150°C para aprovechar esa disminución gradual de temperatura que por un lago genera vapor más rápido al agregar el agua y por el otro puede dar algo de color a la cheesecake.

Con ayuda del vapor de agua y la temperatura relativamente baja de horneado será menos probable que la cheesecake de ricotta se reseque demasiado y se agriete antes de estar cocida apropiadamente. Eso sí, la tarta después de una hora de horneado aún debe verse algo movediza o temblorosa en el centro, no completamente cuajada. Esto porque el calor residual es lo que la terminará de cocer mientras se enfría a temperatura ambiente. Si ya está demasiado cuajada al salir del horno es más probable que se le hagan grietas profundas en la superficie.

También por esta razón es que hay que dejar que la tarta enfríe completamente y luego que refrigere. Para que termine de cuajar, se asiente y su sabor y textura sean óptimos para comer.

Recuerden que cada horno es un mundo y por ello los tiempos de horneado de todas mis recetas son siempre orientativos. Con la práctica y observando a través de la puerta del horno la cheesecake se pueden hacer una idea de como va. Evidentemente, si adaptan las cantidades para moldes más grandes, el tiempo de horneado también será mayor pues habrá mayor cantidad de mezcla para hornear.

Al final del video les presento una opción de presentación con ganache de chocolate con leche. Este paso es opcional y como les mencioné más arriba, si no quieren hacerlo pueden aumentar un poco la cantidad de azúcar de la receta. O bien pueden usar otros toppings, frutas frescas, crema chantilly o cualquier aditivo que les guste combinar con este sabor.

Y ahora la receta paso a paso

Cheesecake de Ricotta

Deliciosa tarta de queso ricotta con base de galletas, facil de hacer y sin usar máquinas.
Prep Time25 minutes
Cook Time1 hour
Course: merienda, Postre
Cuisine: internacional
Keyword: cheesecake, ricotta, tarta de queso
Servings: 14 porciones
Author: Rebeca

Ingredients

Para la base

  • 100 g Galletas de mantequilla tipo María (1 Tza.)
  • ¼ Cdta. Sal
  • 1 Cda. Azúcar
  • 70 g Mantequilla sin sal derretida (⅓ Tza.)

Relleno

  • 250 g Queso crema tipo Philadelphia (Temp. ambiente)
  • 250 g Queso ricotta (Temp. ambiente)
  • 90 g Crema de leche (nata para montar) (6 Cdas.)
  • 2 Cdas. Fécula de maíz (maicena)
  • 1 Cdta. Extracto de vainilla
  • 100 g Azúcar (ver notas) (½ Tza.)
  • ¼ Cdta. Sal
  • 3 Huevos medianos (Temp. ambiente)

Opcional para decorar

  • 50 g Chocolate con leche
  • 20 g Crema de leche (nata para montar) (1 Cda. + 1 Cdta.)

Instructions

  • Precalentar el horno a 180°C / 350°F.
  • Colocar una bandeja apta para horno en la base del mismo para que se vaya precalentando también.
  • Preparar un molde desmontable de 18cm bien sea enmantequillándolo o con papel para hornear.

Base de galletas

  • En una bolsa tipo ziploc agregar las galletas, sacar el aire y cerrar la bolsa.
  • Con un rodillo o similar moler las galletas dentro de la bolsa.
  • Una vez molidas abrir la bolsa y agregar la sal y el azúcar.
  • Cerrar y mezclar los ingredientes.
  • Abrir la bolsa y agregar la mantequilla derretida. Cerrar y mezclar bien hasta que toda la galleta esté humedecida.
  • Transferir las galletas al molde preparado y distribuir por toda la base y un poco por los lados, compactando bien la mezcla.
  • Llevar al horno precalentado entre 5 a 7 minutos.
  • Sacar del horno y dejar enfriar.

Relleno

  • En un recipiente agregar el queso crema y el queso ricotta y mezclarlos bien con movimientos suaves.
  • Agregar la maicena y la crema de leche y batir a mano despacio solo para incorporar y hasta que no se vean grumos.
  • Agregar la vainilla, el azúcar y la sal. Mezclar aún despacio solo hasta integrar.
  • Agregar los huevos uno a uno, integrando bien el primero antes de agregar el siguiente.
  • Transferir la mezcla al molde con la base de galletas (ver notas 2).
  • Llevar la tarta al horno, en la segunda rejilla contando de abajo hacia arriba.
  • Agregar agua caliente (con cuidado, ya que genera vapor rápido) a la bandeja que se estaba precalentando en el horno.
  • Cerrar el horno y bajar la temperatura a 150°C / 302°F.
  • Hornear durante aproximadamente una hora, hasta que los bordes de la tarta estén cuajados pero el centro aún se vea algo movedizo o gelatinoso.
  • Retirar del horno y dejar enfriar completamente a temperatura ambiente.
  • Refrigerar por al menos 4 horas, idealmente de un día para otro.
  • Al día siguiente, desmoldar y disfrutar.

Opcional

  • En un pequeño recipiente apto para microondas agregar el chocolate y la crema de leche.
  • Calentar al microondas en intérvalos de 15 segundos hasta que se derrita completamente.
  • Pasar a una manga pastelera y cortar la punta.
  • Decorar el tope de la cheesecake con el ganache de chocolate.

Notes

  1. Si no se va a agregar el ganache de chocolate al presentar la tarta se puede aumentar el azúcar a 150g o 3/4 de taza.
  2. Para facilitar el traslado hacia y desde el horno pueden colocar el molde desmontable sobre una bandeja para hornear. 

Y ya tendremos una riquísima y cremosa cheesecake que hicimos completamente a mano. Se conserva en refrigeración para un mejor sabor y puede durar de 2 a 3 días.

Espero que les haya gustado la receta.

Si preparan esta deliciosa receta de cheesecake de ricotta me encantará saberlo y ver sus fotos. Me las pueden hacer llegar vía Instagram o facebook a @poramoralhorno.

Aviso legal: En esta página puede contener enlaces afiliados. Puedo recibir una comisión por las compras realizadas a través de estos enlaces. No hay costos adicionales para ustedes. Dónde, cuándo y cómo compren un producto, por supuesto, depende de solo de ustedes.

Muchísimas gracias por leer hasta acá y nos vemos en la próxima receta.

Quizá te puede interesar:

Please follow and like us:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Recipe Rating