En una taza agregar la leche tibia, la levadura de panadería y dos cucharaditas del total de azúcar de la receta. (Ver notas 3)
Mezclar y dejar reposar 10 minutos hasta que active la levadura.
Mientras tanto en un bol grande agregar la harina, la sal y el resto del azúcar. Mezclar para que se distribuyan estos ingredientes.
Pasados los 10 minutos agregar en una jarra los huevos, la mezcla de leche con levadura, la vainilla y la mantequilla derretida. Mezclar hasta que sea un batido homogéneo.
Agregar los ingredientes líquidos sobre la harina preparada con sal y azúcar. Mezclar con cuchara de madera o espátula hasta humedecer toda la harina.
De ser necesario usar las manos para asegurar que todo está humedecido. Formar una bola con la masa y cubrirla con papel film.
Se deja reposar 20 minutos y pasado este tiempo humedecerse las manos y tomar la masa de abajo hacia arriba y de afuera hacia el centro doblándola sobre sí misma circularmente. (ver notas 4)
Se cubre la masa, se deja reposar 20 minutos más y se repite el procedimiento.
En total son 4 reposos de 20 minutos cada uno, y cuatro dobleces de la mas.
Después del 4 doblez se hace una bola con la masa y se transfiere a un bol engrasado (ver notas 5), se cubre y se deja reposar hasta que doble su volumen.
Una vez fermentada, se retira del bol y se amasa un par de minutos para sacar los gases de la fermentación.
Se hace una bola de masa y si tienen báscula se pesa para dividir en 12 porciones de igual tamaño. En mi caso cada porción fue de 90 a 91g. (ver notas 6)
Se van colocando las porciones de masa en una fuente para horno engrasada (la mía es de 28 x 22cm).
Se cubren las porciones de masa y se deja reposar nuevamente hasta que hayan doblado su tamaño. Aplica el mismo principio que para el primer reposo.
Cuando observen que ya casi doblan su volumen se precalienta el horno a 180°C / 350°F con calor arriba y abajo.
Al finalizar el levado y cuando el horno esté caliente se mezclan el huevo con la leche y se pincelan los panes.
Se llevan a hornear durante aproximadamente 20 minutos. Hasta que estén dorados, esponjosos y al darles palmadas suenen huecos.
Se retiran del horno y se dejan reposar 5 minutos en la bandeja.
Luego se desmoldan sobre una rejilla y se los deja reposar hasta que enfríen completamente a temperatura ambiente.
Si lo desean, los pueden pincelar mientras estén calientes con miel o con mantequilla. Esto es opcional.
Una vez fríos ya se podrán disfrutar.